¿Qué es?

La hidatidosis o equinococosis quística (EQ) es una zoonosis causada por el parásito Echinococcus granulosus, y que transmite el perro a través de su materia fecal.

Cuando el perro parasitado elimina su materia fecal, salen con ella los  huevos del parásito que contaminan el agua, el pasto, la tierra, las verduras y hasta quedan adheridos en el pelo del mismo perro.

Cuando las ovejas, la cabra, la vaca, el cerdo, la llama y otros herbívoros comen los huevos,  con el pasto o el agua, en sus pulmones, hígado, riñones u otros órganos o visceras, se forman los quistes hidatídico. Si el perro es alimentado con estas vísceras parasitados, en su intestino se forman otra vez los parásitos, y empieza el ciclo nuevamente.

Es reconocido como un importante problema de salud en América del Sur, donde la cría de ganado, asociada a la presencia del perro y la costumbre de alimentarlos con vísceras crudas genera condiciones ideales para sostener el ciclo de la enfermedad.

¿Cómo se transmite?

La enfermedad hidatídica o hidatidosis se produce cuando los huevos del parásito llegan a la boca de las personas, con más facilidad en  niños.  Puede ocurrir al darle besos al perro, dejarse lamer por el perro, comer verduras o tomar agua contaminada con materia fecal o caca de un perro con el parasito.

¿Cuáles son los síntomas?

Las personas enfermas desarrollan quistes en el hígado y los pulmones, aunque también pueden llegar a otros lugares del cuerpo. Las personas con quistes hidatídicos pueden no tener síntomas durante muchos años (son portadores asintomáticos) hasta que el quiste es más grande y aparecen los síntomas (convirtiéndose en portadores sintomáticos).

¿Cómo es el tratamiento?

En las personas los quistes pequeños se tratan con medicación, pero si alcanzan un gran tamaño se debe recurrir a la cirugía.

En los perros también se realiza un tratamiento con un antiparasitario especifico, evitando   la eliminación de los huevos del  parásito por materia fecal.

El sistema público de salud entrega gratuitamente medicamentos para el tratamiento en seres humanos y para la desparasitación de los perros.

¿Cómo se puede prevenir?

No alimentemos a los perros con achuras o vísceras crudas.

Desparasitemos con un tenicida a los perros cada 45 días.

Vacunemos a las ovejas y cabras.

Mantengamos a los perros lejos de los lugares donde se carnea.

Lavemos con agua y a chorro fuerte las frutas y verduras.

Evitemos que los perros laman a los niños.

Lavemos bien nuestras manos, después de tocar un perro, antes de comer y tantas veces como sea necesario.

Cerquemos las huertas para que no entren los perros, a hacer caca dentro de la huerta o quinta.

Tengamos solo los perros necesarios y bien cuidados.

CICLO DOMÉSTICO DE ECHINOCOCCUS GRANULOSUS EN PATAGONIA SUR

MEDIDAS DE PREVENCIÓN Y CONTROL

A.- Larvas en el hospedador intermediario. Protoescólices en los quistes hidatídicos de ovinos, caprinos y otros herbívoros.
B.- Adultos en el hospedador definitivo. E. granulosus en el intestino de los perros.
C.- Huevos en el ambiente. Contaminan agua, tierra, pastos y verduras.
 
1.- Los hospedadores intermediarios ingieren los huevos del parasito E. granulosus que contaminan el pasto y el agua
2.- En los pulmones, hígado y otras vísceras se desarrollan los quistes hidatídicos, que pueden tener protoescólices en su interior (quistes fértiles).
3.- Durante la carneada o faena de ovinos y caprinos, para consumo o comercialización, los perros pueden acceder a las vísceras, especialmente el hígado y los pulmones.
4.- El perro que come vísceras parasitadas con quistes hidatídicos fértiles desarrolla en su intestino el parásito adulto E. granulosus.
5.- Los huevos de E. granulosus son eliminados periódicamente con la materia fecal de los perros parasitados produciendo la contaminación biológica del medio ambiente.
6.- El hombre se puede infectar por dejarse lamer o acariciar a un perro parasitado con E. granulosus y por ingerir huevos de E. granulosus al alimentarse de verduras o al beber agua contaminada con materia fecal de perro parasitado.
7.- Los niños son los más expuestos a enfermar.